El Mercado de San Telmo, que data de 1897, se ha transformado en un destacado polo gastronómico en Buenos Aires. Antiguos puestos de alimentos conviven ahora con una variada oferta de restaurantes, bares y cafeterías, atrayendo a locales y turistas por igual. Esta evolución lo ha convertido en un destino imprescindible para los amantes de la comida en la ciudad.

El mercado tiene varias entradas, pero la más cercana está a unos metros caminando para el lado de  humberto Primo. 

Dentro tendrán que encontrar un puesto que vende muñecas antiguas y encontrar en la vidriera una antigua maquina de coser de juguete  que se encuentra sobre su viejo manual en Alemán  e indicar cuales son las 2 últimas palabras que dice el recorte tal cual están escritas.